Sacando a colación el tema de las humedades en China del que hablaba la semana pasada, he recuperado unas afotos que tenía por mi disco duro del baño en el hotel de Tokyo donde me solía alojar cuando visitaba la capital nipona.
El remojo y sus efectos devastadores en el espejo del servicio de mi casa ya lo pudísteis comprobar. En contraposición, aquí os voy a dar cuenta de cómo se las gastan los japoneses, siempre sorprendiendo al personal con sus inventos, a veces inútiles y otras no (como en este caso).
No es que tenga especial afición a hacerle fotos a los váteres que me sirven de refugio y alivio allá donde viajo, pero sí hay algo que me llama la atención, pues le echo unas instantáneas para luego escribir esta basura de crónicas. Recuerdo por ejemplo la historia de los Speakers en Qingdao o la de las Cadenitas de Alarma en aquel hotel de Hanzhou. Esta de mi alojamiento en Tokyo también tiene su aquel.
Fíjense ustedes en la luna del lavabo antes de pegarme una ducha. Hasta ahí nada anormal ni paranormal. Un espejo normal y corriente, muy limpito él.
Tras la pertinente apertura del agua caliente durante un buen rato y a la espera de que suceda lo que ocurre en todos los cuartos de baño del mundo, el cristal se empaña sólo parcialmente y como por arte de magia, una curiosa zona perfectamente acotada permanece intacta y en impoluto estado de reflejo.
Estos japoneses están en todo. Lo más normal es que uno salga de la ducha y para poder mirarse agarre la camiseta o los calzoncillos sucios y los restriegue por el vaho del espejo hasta que se pueda ver más o menos. La superficie queda echa unos zorros y llena de restregones que luego cuando se secan, dejan una especie de frenazos que cabrean a la señora de la limpieza más paciente.
No tengo ni idea de cuál será la tecnología para que ese rectángulo no se empañe, pero me temo que no debe de ser nada barata pues de lo contrario ya se habría extendido la invención por todo el mundo. Aún así, no estoy del todo convencido que dicho sistema fuera lo suficientemente potente para combatir los vapores acumulados en los espejos del territorio chino... lo de la humedad en China ya os he contado que es harina de otro costal, too much.
No es una tecnología cara. Simplemente unas resistencias que calienten esa zona.
Consigues el mismo efecto aplicando aire caliente (del secador por ejemplo)
Amiguete Fran, bueno es saberlo... ahora falta averiguar por qué a nadie más en el mundo se le ocurre aplicar este (en teoría) sencillo sistema...
Saludotes!!
Escrito por Fernandet a las 13 de Septiembre 2011 a las 01:33 PMcurioso al menos :)
Lo del secador yo lo aplico siempre, porque despues de lavarme el pelo me lo seco con el secador pero antes desempaño el espejo
Escrito por baixue a las 20 de Septiembre 2011 a las 12:31 AMQué bueno! Me he partido de risa al ver la foto con el espejo con la parte para maquearse no empañada porque yo hice exactamente la misma en el hotel que me alojé en Tokyo!
Pensé: Estos japoneses son la ostia siempre a la vanguardia de todo y mimando en el más mínimo detalle a los clientes.