GUANGZHOU, MI CASA

Novia con Chirucas

¿Vosotros qué pensáis de alguien en esta posición?

A. Francotirador Albano-Kosovar a punto de darle matarile a ursurpador venido de tierras occidentales.

B. Ciudadano local con afán micológico, explorando el terreno de cerca para hacer una buena sopa pa cenar.

C. Borracho agotado que ha desfallecido de tanto patearse las cuestas de Jiu Zhai Gou y está a la espera de que venga su equipo de colegas mamadores de Bai Jiou para reanimarle e ir juntos a por más alpiste (como suele pasar en los terrenos urbanos).

Pues ninguna de las anteriores. El reptante es un fotógrafo de estudio que intenta tomar instantáneas para recopilar un álbum de bodas y facturar a la feliz pareja.

Me sorprendió que a pesar de las horas de autobús y lo lejos que estábamos de la civilización, allí había quién para tener un bonito recuerdo de su enlace matrimonial prometiéndose amor de por vida, pues que hubiera parejas de chinos retratándose para el archivador familiar. Pero es que el sitio lo merece.

Es genial estar peleándote por un espacio para hacerte una foto entre tantos visitantes, y de repente encontrarte con un grupo organizado que está urdiendo un plan para que los descendientes de los protagonistas conserven las mejores imágenes el resto de su existencia.

No me cabe duda que el susodicho álbum en el futuro será una joyita para toda la familia y me alegro de que en los años venideros, nadie se entere de cómo se tomaron las fotos. Las novias iban con Chirucas (dignas de mi amigo Javier R.), perfectamente disimuladas bajo los faldones de esos ostentosos trajes que se gastan para contraer matrimonio.