GUANGZHOU, MI CASA

Kuala Lumpur Casi Ná

Pues mi breve paso por Malasia dio para hacer un montón de afotos y ver poco... pero poco, aunque lo cierto es que Kuala Lumpur tampoco tiene mucho para visitar. Se nota que es un país de gente tranquila, amistosa y agradable con los turistas. Se está muy a gusto, un lugar para ir a olvidarse un poco de todo y pasar una temporada a la Bartola... dicen que sobre todo en la costa... cosa que desconozco completamente, por lo que nos centraremos en la capital.

Lo más destacable, ¿cómo no?, las Torres Gemelas de Kuala Lumpur (las Petronas). De noche son impresionantes, pero no puedo poneros ninguna foto porque mi cámara no da mucho de sí en esas condiciones y las que les hice con toda la iluminación, parecen Poltergeist, así que el que tenga curiosidad, que se vaya a las que hay en las afotos del Google.

Estas que vienen ahora sí que las hice yo, desde un edificio todavía más alto que las torres esas Petronilas, concretamente desde la Torre de Comunicaciones, más de 400 metros parriba, no aptas para los que padezcan mal de alturas:

El tema es que para subirte a las Torres Petronilas (ya sé que se llaman Petronas, pero me mola llamarlas Petronilas), hay que madrugar mucho y hacer cola, así que me fui a la Torre de Comunicaciones, que vas a la hora que te da la gana, no hay que esperar para subir, es más alta que las Gemelas, tiene mejor vista y pa rematar, una terracita abajo donde hacen un café que resucita a un muerto.

Pues eso, que con visitar la torre esta y echar unas afotos, ya lo tienes casi todo hecho allí. Por lo demás, te puedes ir a ver unas mezquitas, la plaza de Merdeka y el Barrio Chino.

1. Las mezquitas son algo bonito de ver, aunque las más grandes están fuera de la ciudad y las que te puedes encontrar en Kuala Lumpur, son de tamaño más bien reducido, aunque muy coquetas:

Eso sí, podrás entrar a visitarlas siempre y cuando sigas estrictamente el código ético de vestimenta adecuada. Los hombres lo tenemos fácil, que podemos hacer un tour por dentro hasta en manga corta, pero las mujeres tiene que ir más tapadas que los mejillones en lata.

2. Aluego, la Plaza de Merdeka, que como su propio nombre indica, es un poco Merdeka. Una plazoleta donde los ingleses se arrejuntaban para jugar a ese deporte tan emocionante y rápido que es el cricket, en la que quedan una explanada de pasto verde, un club social superelitista y un par de edificios coloniales de poca altura.

Malasia es un país multiracial y allí no hay muchas generaciones malayas al 100%. Una colega argentina muy majeta que conocí, me lo definió así: "Si el que ves es muy oscuro, muy oscuro muy oscuro: Indio. Si es muy claro muy claro muy claro: Chino. Si no es ni muy oscuro ni muy claro: Malayo".

3. Dado el nivel de abundancia de culturas, no faltó para terminar la visita, una parada en el Barrio Chino de Kuala Lumpur, es decir, un mercadillo donde venden comida, fruta y toda la ropa y cachivaches que me puedo encontrar en China por todas partes... pero bueno, lo echaba de menos, hice unas compritas y me tomé un par de birras.

En un sitio cerca del mercao chinarro, conocí al Jimmy Hendrix malayo... un artista con una especie de guitarra hecha de bambú y que iba con más plumas que un pavo real y con más graffittis por el cuerpo, que los vagones del metro de Nueva York. Pero la verdad es que aquello sonaba de maravilla.

Moverse por Kuala Lumpur es fácil. Te cojes un TEKSI de oficina de prepago (que hay bastantes) y ya está, porque como te lo pilles de buenas a primeras en medio de la calle, hay un alto índice de posibilidades de que el TEKSISTA no hable nada de inglés y entonces tengas que hacer con él de Dr. Livingstone (supongo), enseñádole el mapa y la brújula para que te pueda llevar a tu destino.

Y aluego, cuidadito con entrar en los TEKSIS echando aromas a lo que sea. El bocata que no huela, ni se te ocurra fumar... y si te cantan los pinreles, te jodes y te vas a patita, pero en el TEKSI no te puedes subir, y si no os lo creéis, fijaros bien en la señal de prohibido del medio.

Las señales de Stop... otro gran fichaje para mis colección de anuncios de Coca-Cola, misterio de indicaciones de circulación, que desvelé hace tiempo en Túnez. "Que te pares ahí quieto parao" en malayo, se dice: BERHENTI, que no hace falta ser Catedrático en Letras por la Universidad de Salamanca, para darse cuenta de que el malayo no es una lengua derivada del latín.

Y poco más. La noche de Kuala, cojonuda, hay marcha para atender a una legión de juerguistas y viciosos enloquecidos... bueno, y para gente que le guste divertirse sanamente, por supuesto que también. Además tuve la suerte de que unos aborígenes coleguitas de mi amiga argentina, me llevaran a una fiesta que cuando llegamos, la gente estaba con más calma que el contestador de Bela Lugosi... la culpa la tenía un pastel que habían cocinado con demasiado "azucar moreno". Menos mal que no me van mucho los dulces.

Ale, os dejo con la última afoto que hice de camino al aeropuerto, donde podéis ver en el centro a la derecha, las Torres Petronilas y a su siniestra, la Torre de Comunicaciones.

Con esto y un bizcocho (sin "azucar moreno"), hasta mañana a las ocho... o no.

Escrito por Fernandet, 16 de Abril 2007 a las 10:02 AM